El Gobierno pretende incorporar los pisos a la oferta de vivienda social
El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha anunciado la incorporación al presupuesto del próximo año de una partida destinada a la adquisición de viviendas en poder de los bancos o de la SAREB para incorporarlos a su oferta de vivienda protegida. La medida, -según han argumentado desde la Consejería de Vivienda- pretende aprovechar el momento de stock de vivienda para comprar y ampliar su cartera de vivienda social a buenos precios.
Según ha explicado el consejero de Vivienda, Pedro Rollán, la idea del ejecutivo es la consignación de 10 millones de euros que se destinarán a la compra de no menos de 70 viviendas a bancos y a la SAREB para que puedan comenzar a entregarse según los plazos que marca la propia administración. Según el Gobierno regional los plazos para la entrega de una vivienda social son de unos seis años. Plazos que dependen del rosario de trámites desde que la vivienda es entregada por el promotor inmobiliario hasta que finalmente se colocan en el circuito inmobiliario (redacción del proyecto, publicación del concurso, adjudicación, ejecución)
La Comunidad de Madrid tiene en la actualidad unos 24.000 pisos de vivienda protegida, de las que unas 300 están vacías para atender emergencias familiares o catástrofes. Madrid está ya en conversaciones con varias entidades bancarias para negociar los precios de la compra. Se da la paradoja de que debido a la crisis de la vivienda los precios del mercado libre son similares, en la actualidad, a los de la vivienda protegida.